Llega Marzo y con ello el primer día del jardín de nuestros pequeños, la entrada a la sala cuna o jardín infantil, es sin dudas un momento importante, representando para muchas familias todo un desafío, ya que por primera vez nuestros hijos/as deberán salir de la comodidad del ambiente familiar para quedar al cuidado de terceros, lo que implica un acto de confianza importante y un proceso de adaptación para el niño/ a y su familia.
El ingreso de nuestros hijos/as al mundo educativo es un hito significativo en la vida de ellos, y como todo en la vida, este proceso es variable, debido a que es una experiencia individual y cada niño y niña lo vive de manera distinta, en algunos casos puede que se adapten de manera natural y sin dificultades, como en otros casos en donde se enfrentan con ansiedad y temor y requieran más tiempo e incluso semanas en adaptarse a este nuevo ambiente.
Esta nueva experiencia genera distintas emociones en nuestros pequeños/as y para nosotros los adultos padres/ madres, hay que recordar que es la primera separación importante, por lo tanto en los primeros días puede aparecer ansiedad, miedo, o incertidumbre. Como padres debemos estar presentes y poder manejar nuestras emociones ya que nuestros pequeños son muy receptivos a estos estados, así que debemos estar tranquilos emocionalmente para poder brindarles el apoyo que necesitan, acompañarlos, incentivarlos y escucharlos durante este proceso de manera que se sientan seguros y confiados…
Por otra parte, los expertos recomiendan, vivir un periodo de adaptación de manera gradual y progresiva, visitar el jardín con anterioridad, conocer a la Educadora y las demás adultas que estarán a su cargo y cuidado, idealmente poder dejar a nuestros niños/as por periodos cortos e ir aumentando progresivamente su tiempo, hasta que la Educadora lo considere necesario.
Para que la adaptación no se revierta, es importante que el niño/a no pase por situaciones que le provoquen temor o revivan su sentimiento de abandono, por lo que se recomienda siempre estar a la hora de salida, si el pequeño llora cada vez que nos separamos de él, es recomendable quedarnos, contenerlos desde el cariño y la compresión, y explicarles que en un par de horas volveremos por ellos.
Por último, otro elemento que favorece en esta transición, es permitirle llevar un objeto, manta o juguete que le guste, esto lo ayudará a sentirse seguro y confiado en este nuevo lugar.
Espero que sea de ayuda, y no dudes en seguir tu instinto! el cariño, respeto y compresión ayudarán a tu pequeño a superar esta nueva etapa.