Los juegos sensoriales son tremendamente beneficiosos para nuestros pequeños, es una poderosa herramienta de aprendizaje, ya que los niños/as conocen su entorno, explorando, tocando, probando por medio de sus sentidos.
Este tipo de juegos, permite a tu pequeño despertar su curiosidad, además ayuda a desarrollar los sentidos y potenciar sus destrezas motoras.
Aprovechando el interés por los colores, he preparado esta experiencia, es muy sencilla y nos brinda la oportunidad de aprender a través del juego y la exploración. Además lo disfrutan niños y niñas de todas las edades.
¿Qué necesitamos?
Materiales:
1 paquete de tallarines
Colorantes de alimentos
Bolsas plásticas o ziploc
Contenedor o bandeja
Preparación:
Prepara el paquete de tallarines como indica el envase (al dente) , cuando estén listos, colar y enjuagar con abundante agua fría de manera que elimine el almidón. Deja enfriar por unos minutos.
Cuando estén fríos, separa en bolsas y añade de 10 a 12 gotitas de colorante de alimentos dependiendo de la cantidad de pasta que hayas colocado en cada bolsa.
Agitamos para teñir, sacamos y enjuagamos para sacar el exceso de colorante.
Luego, es momento de colocarla en un recipiente y que comience la diversión
Posibilidades de juego
Esta experiencia sensorial está destinada para bebés desde los 8 meses hasta niños pequeños de +3 años.
Al tener este rango de edad, son distintas las posibilidades de juego, por ejemplo con bebés es una experiencia de exploración, de sentir texturas, y sabores. En cambio uno de 2 años quizás juegue a servir o preparar comida, o el de 3 años lo utilice para recortar y ejercitar esta nueva habilidad.
Lo importante es, brindar la posibilidad de juego libre, de exploración, y acompañar sus descubrimientos, como también aprovechar la instancia para potenciar el lenguaje y el reconocimiento de colores, trabajar las habilidades motrices finas, entre otras.
***Importante: Cuando realices este juego con bebés es necesario estar siempre acompañándolos y no dejarlos solos con el material***