En medio de la convulsión social que vive Chile por estos días, los niños también se ven afectados. Ellos perciben que algo sucede y se dan cuenta que los adultos que los rodean están alertas, conectados a las redes sociales y a la TV más de lo habitual. En este contexto, es que como Fundación CAP y desde nuestro programa “Aprender en Familia”, queremos entregar recomendaciones a los padres, para apoyar a sus hijos.
Los niños se enteran de todo lo que está pasando. Es importante no marginarlos de la conversación, sentarse con ellos y preguntarles qué saben sobre lo que está pasando, qué información manejan y cómo se sienten al respecto. La tarea de los adultos es entregarles información que los ayude a comprender, facilitando el reconocimiento, expresión y validación de sus emociones. Cuando se generan estados de alerta, el cuerpo cambia, la sensibilidad a los estímulos aumenta y nos volvemos más reactivos; por eso es tan importante favorecer la contención y dar seguridad.
Para esto es necesario mantener la calma y generar espacios seguros, de esta forma los niños sienten compañía y estabilidad. En segundo lugar, es importante explicar que se vive una tensión social con palabras que puedan entender y evitar la exposición excesiva a medios. En cambio, que hagan cosas que les guste hacer como leer o jugar. O incluso hacerles escribir o dibujar en torno a la siguiente pregunta: ¿De qué manera puedo aportar yo para que Chile sea un mejor lugar para todos?
Y, por último, reforzarles la importancia de escucharnos unos a otros, junto con ser amables y tratar con respeto a las personas. No importan si son pequeños o ancianos; si vienen de otro país, si piensan o tienen distintos intereses, la unidad debe prevalecer.